La Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) inició ayer las celebraciones de los 50 años de su fundación con una eucaristía solemne en la Catedral de Santo Domingo, donde el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, presidente del organismo, destacó los aportes y las contribuciones al bien común de la iglesia católica, a través del Episcopado.
La eucaristía fue concelebrada por el nuncio apostólico, Jozef Wesolowski, y todos los obispos del país, con excepción de monseñor José Dolores Grullón, obispo de San Juan, cuyos médicos le recomendaron descanso luego de sufrir el jueves una arritmia cardíaca.
En representación del gobierno asistió el vicepresidente Rafael Alburquerque, y la ministra de Educación, Josefina Pimentel, mientras que el presidente del Senado, Reinaldo Pared, y un grupo de senadores, entregaron un pergamino de reconocimiento a la Conferencia Episcopal por su labor en beneficio de la educación, los valores morales, la paz social, la salud y la asistencia a los pobres, realizada a través de las distintas diócesis del país y de las comisiones de los obispos. El pergamino, otorgado mediante resolución del Senado a solicitud del senador de San Francisco de Macorís, Amílcar Romero, fue entregado al cardenal López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, por Pared Pérez, Cristina Lizardo, Eddy Mateo Vásquez, Rafael Calderón, Prim Pujals, el propio Romero y otros senadores.
Tras concluir la eucaristía, Julio César Castaños Guzmán, ex presidente de la Junta Central Electoral (JCE) y juez de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), destacó los aportes de la Conferencia del Episcopado en los distintos niveles de la sociedad dominicana, y especialmente su mediación en tiempos de conflictos, su decisión de defender la fe y los valores morales y democráticos del pueblo dominicano, pero sobre todo la justicia y el bienestar social.
Además, asistieron el presidente de la SCJ, Mariano Germán; del Tribunal Superior Electoral, Mariano Rodríguez; el presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado, y los embajadores de Suecia, Haití, Italia y otros miembros del cuerpo diplomático, así como decenas de sacerdotes y laicos comprometidos.
Estructura interna.
La Conferencia del Episcopado Dominicano fue fundada el 22 de septiembre de 1962 por los obispos de entonces, Octavio Antonio Beras Rojas, Arzobispo Coadjutor de Santo Domingo; Hugo Eduardo Polanco Brito, obispo de Santiago; Francisco Panal Ramírez, de La Vega; Tomás Francisco Reilly, de San Juan de la Maguana, y Juan Félix Pepén Solimán, de Higu¨ey.
Los estatutos de la Conferencia fueron aprobados “ad experimentum” por la Santa Sede. Tuvo como antecedente la creación de una Comisión Nacional Episcopal de cara a la Conferencia del Episcopado Latinoamericano que se celebró en 1955, en Río de Janeiro.
Fuente: Listin Diario